¿Necesitas un cerrojo de seguridad en tu casa y no sabes cómo hacerlo? Sigue leyendo y verás que podrás hacerlo tú mismo, siguiendo las indicaciones del empaque conjuntamente con las que encontrarás en este artículo.
Hay algunos detalles que debes conocer, como por ejemplo, que entre las opciones de cerraduras de seguridad la que cuenta con tres puntos es una de las más confiables.
Esta identificación indica que la cerradura ofrece la posibilidad de cerrar la puerta atravesando tres varillas en puntos correspondientes a este número. Las varillas están fabricadas con tubos de acero que vertical y horizontalmente bloquean la puerta donde se instala.
Cómo se hace esta instalación
Para comenzar debes planificar el trabajo si la puerta que vas a escoger es la que permite el acceso desde la calle, dado que momentáneamente quedará sin protección y tienes que tomar las medidas necesarias para prevenir sorpresas no gratas.
El procedimiento para contar con una de estas cerraduras contempla empezar con la desinstalación de la que está colocada actualmente en la puerta, para seguidamente medir la nueva cerradura, señalando las áreas en las cuales debes realizar perforaciones con el taladro para concretar su instalación. haz click para ir a la referencia
Comienza a abrir los agujeros necesarios, cuidando de no dañar la puerta, para luego ir fijando cada uno de los tornillos de la caja de seguridad característica de este tipo de dispositivo, agregando posteriormente su protector y el anillo que permita incrustarlo.
Como este sistema ubica los tubos en distintos puntos, entre los cuales está el centro de la puerta por donde hace una de las trancas e igualmente la atraviesa de arriba hacia abajo, debes agujerear el piso para que el tubo correspondiente a esta área pueda atravesarlo fijando la puerta en su lugar.
Cada tubo de los tres puntos que comprende el dispositivo que estás instalando, cuenta con sus protectores y anillos o guías, que deben ser colocados firmemente mediante la colocación adecuada de sus tornillos, aspecto que garantizará la estabilidad de este tipo de cerradura.
Revisa que todo esté en orden comparando tu trabajo con las instrucciones del dispositivo, verificando que todas cuenten con su respectivo protector y procede a colocar la vara media siguiendo con la instalación de la manilla o manivela.
La finalización del proceso se presenta cuando puede probar el sistema y limpiar el área de trabajo, dando inicio simultáneamente a disfrutar de una tarea que has realizado por ti mismo dando como resultado el contar con mayor seguridad en tu vivienda.
Si quieres aprovechar de retocar la pintura de la puerta, recuerda lijarla previamente y cubrir cualquier rotura con masilla para que la superficie quede uniforme antes de aplicar la pintura.
Deja secar la masilla, así como cada capa de pintura que le añadas para que el resultado muestre que a pesar de ser trabajo manual y casero no tiene nada que envidiar al trabajo de un profesional en el ramo. ¡Y comienza a disfrutar de la nueva entrada a casa!